Cómo no convertirse en editor

Esta gamberrada no es una guía para hacerse editor, ni mucho menos para hacerse autónomo. Lo hago por varias razones secundarias ―por mero divertimento, para contestar las dudas de futuros editores y para agradecer a todos aquellos que me han apoyado a lo largo del último año― y por una razón principal ―porque odio dejar las preguntas sin respuesta―. Son parte de los pasos que he seguido para crear el sello Letra r Editorial.

Si quieres hacer las cosas bien, llama a un asesor de confianza, ponte en sus manos para los trámites con la administración y consulta a editores con más experiencia. Si tienes suerte, te contestarán. Mientras tanto, puedes leer este monólogo.